El único símbolo de superioridad que conozco es la bondad.| Ludwig van Beethoven

“El tipo de lluvias que se presentaron en los últimos días, correspondieron a un frente que nubló todo el cielo, y fueron diferentes a las típicas tormentas de verano. En algunos lugares de la provincia cayeron cincuenta milímetros en veinticuatro horas, y verdaderamente se han aprovechado porque se ha dejado de regar. Los inspectores de cauces y los mismos usuarios han tenido comunicación y acordaron dejar de utilizar agua de riego. Naturalmente, esa cantidad de agua que no se utilizó ha quedado guardada en los embalses y se usará en otros momentos que sean necesarios. En los dos ríos, Diamante y Atuel, hubo cortas de las dotaciones de riego. No tengo datos del Río Diamante, pero en el Atuel el jueves habían bajado la erogación a ocho metros cúbicos y las inspecciones informan que no habrá riego hasta mediados de la semana próxima. Cuando llueve de esta forma, es posible acumular el agua, no así en las tormentas de verano que suelen ser muy intensas, pero de corta duración. Sabemos que no hay pronósticos de lluvias en el corto, mediano, y largo plazo; lo único que tenemos como dato se origina parte del Servicio Meteorológico Nacional, que dice que las temperaturas para el trimestre octubre, noviembre y diciembre son normales. No hay mayores precisiones que éstas. Solo podemos darnos una idea de si estamos en un año Niña, o no, pero dato tampoco es un proyector que tenga la precisión de hace algunos años». «El cambio climático está dejando un poco de lado este fenómeno como algo importante. Lo cierto es que desde Irrigación hacemos el pronóstico de nieve y derrame de volumen de agua que habrá en los ríos según la cantidad de nieve acumulada, pero sin tener en cuenta las lluvias que pueda haber. No obstante, este tipo de fenómenos que hemos tenido en la semana, que no es muy común, los aprovechamos para cortar el agua, pero verdaderamente es difícil que se vuelvan a producir”. Con referencia a la situación de los ríos de cara a la próxima temporada, Villodas comentó que “en los seis ríos de la provincia se repite el pronóstico de sequía. En el Mendoza y el Tunuyán hay pronosticada una sequía severa, y el Diamante y el Atuel presentan pronóstico de sequía extrema y obviamente estamos esperando una situación más complicada. La diferencia en la temporada que comenzó el 1° de octubre, con otras anteriores, hace pensar que la situación en el Diamante puede estar un poco más relajada que en el Atuel, aunque esto no quiere decir que la situación vaya a ser fácil. En el Río Atuel la capacidad de reserva es menor en virtud del tamaño de los diques. Malargüe también tienen un pronóstico de sequía severa, pero el nivel de exigencia es menor por la cantidad de superficies cultivadas”, explicó.

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